miro por la ventana y te veo, como siempre, saliendo del portal y buscando los primeros rayos de sol que ya se asoman por la esquina del edificio. caminas pausadamente, nunca tienes prisa. tu cadencia segura te hace parecer mucho más fuerte de lo que realmente eres. recorres con la mirada cada espacio de esta bonita mañana que nos ha regalado el invierno. parece que la primavera se está acercando, seguro que has pensado en ello y ahora cierras los ojos para disfrutar de esta brisa fresca, que huele a tierra mojada.
ojalá pudiera verte recorrer algo más que este angosto camino. ojalá desde mi ventana viera también el otro lado de la calle. porque mirarte andar, así, es lo primero que hago cada mañana. me ata al mundo y me recuerda que las cosas pasan, que un día nuevo ha empezado y que todo sigue igual, aunque a veces sea un mal consuelo. hoy llevas un vestido estampado que marca tu figura, el pelo al viento y unas botas negras que resuenan contra el suelo a cada paso que das.
no sé como te llamas, no sé en qué planta ni en qué piso vives, no sé en qué trabajas ni si has pasado en esta triste ciudad toda tu vida. pero te conozco. sé que cada mañana a la misma hora sales de casa y te diriges a algún lugar no muy lejos de aquí. nunca coges el autobús, nunca vas hacia la parada del metro. te conozco. sé que eres tú y sé que algún día alguien, algo, no sé qué, no sé por qué extraño movimiento cósmico te enamorarás de mí.
lo sé. y sé que eres muy simpática porque todos los martes saludas al jardinero cuando pasas por su lado y siempre le preguntas cómo está, qué tal sus hijos... sé que no te gusta llevar paraguas y por eso cada vez que llueve bajas con ese chubasquero tan infantil que seguro que alguien te regaló por tu cumpleaños. sé que te gusta leer porque a menudo te veo con un libro bajo el brazo. también sé que a veces escribes notas en papeles que nunca sabes donde has escondido porque a veces te veo llegar y veo como caminas hasta la pequeña tienda de la esquina buscando el trocito que has arrancado de no sabes dónde para apuntar que te hacen falta un par de litros de leche y una docena de huevos.
lo sé. porque te veo. porque cada mañana desde hace un año y medio me asomo a esta ventana siempre a la misma hora, esperando a que salgas del portal y busques los primeros rayos de un sol que aguardará paciente a que cualquier movimiento cósmico haga que nos encontremos y te enamores de mí.
Cerca del cielo
Hace 1 mes
9 comentarios:
Supongo que toda mujer sueña con ser el sueño de alguien, que piense en ella así, pendiente de hasta el más mínimo detalle...me encantó. Un beso.
Preciosísimo, Yo mismo, ¡preciosísiiiiiiimo!
:)
si leyera esto, no podría resistirse, ,se enamoraría de ti sin remedio...
un besonnnnnn
Estos amores platónicos, que buenos son...
besicos
Qué bueno tener una ventana como ésa
Un amor de ventana. Un amor tranquilo y paciente. Es un relato suave, cálido.
Me reconfortó esta mañana. Da esperanza
Besos!
Hace muchos años,yo tambien esperaba a alguen cada dia,tras los visillos de una ventana,no queria que me viera,pero esperaba ansiosa a que pasara para disfrutar de lo que para mi, era lo mas bonito del dia.
Pero el nunca se enamoro de mi,entre otras cosas porque nunca me vio,supongo que si tu no sales de detras de esa ventana te pasara lo mismo.
Ahora soy muy feliz,pero en su momento ese "amor" me hizo sufrir mucho.
Besitos
Es curioso todo lo que podemos saber de alguien, solo observándolo, sin hablar con él o ella...y me parece maravilloso todo lo que puede darte de sí cualquier detalle.
¡Estupenda ventana esa a la que tú te asomas y esta a la que nos asomamos nosotros!
Muchos besos.
pues baja y dile alguna cosa.
mucho mejor que quedarse ahí mirando ¿no?
gracias por la visita....
salud!
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