14.1.08

en la universidad

la universidad es un mundo con distintos tempos, como todos los mundos supongo. las horas en las aulas pasan lentamente, como un líquido viscoso que se desliza pero que nunca deja de pasar. fuera de ellas apenas tienes tiempo para tomarte un café, echar un rato de charla u organizarte una tarde de estudios que casi siempre algo o alguien desorganiza evitando que cumplas tus objetivos.

en las clases no siempre estás atento, más quisieras tú, si fuera así al final no te llevarías tantas sorpresas en los exámenes "esto... ¿esto dónde venía? ¿lo tengo en los apuntes? ¿lo ha dado? ¿y yo dónde estaba?". a veces los profesores divagan y se enredan explicando siempre los mismos conceptos, los mismos temas... otras veces ni siquiera hablan de lo que tienen que hablar, sino de sus vidas, de sus méritos profesionales, del tiempo o de quién sabe que noticia extraña que oyeron por la mañana en la radio.

o sea, que al final cualquier excusa es buena para perderme dentro de mí, a veces lo que cuento aquí es fruto de ese viaje, otras veces me lo guardo para mí. sin embargo, hoy uno de esos profesores me ha hecho pensar. ha hablado de un cierto universo, el universo de los recuerdos, aquel al que envíamos todo lo que ya ha pasado.

y he pensado que es un universo en el que me gusta mirar, como en un baúl, parecido al de esa vieja canción, en el que me gusta buscar historias que alguna vez pasaron o que quizá sólo podrían haber pasado. he pensado que en ese universo están todos los cuentos que leí de pequeño, las novelas que cuando era un poco más mayor me enseñaron cosas de la vida que aún no conocía, historias que algunas mentes imaginaron para nosotros...

en el universo de los recuerdos están todas aquellas personas que una vez encontramos y luego se fueron, están todas esas caras que se pierden en la oscuridad, esas que se cruzan con nosotros por la calle, caras anónimas, personas desconocidas que se alejan camino de no se sabe donde.

el universo de los recuerdos es el universo de lo que ya sabemos pero también de lo que nunca supimos. es el universo de la vida. es nuestro universo.

16 comentarios:

Belén dijo...

Bueno, intenta que en ese universo solo entren recuerdos buenos, los malos los tiras a la basura si? ;)

besos

Carlota dijo...

Me ha gustado mucho lo de todas esas personas anónimas que nos cruzamos alguna vez en la vida...y qué es lo que hace que algunas dejen de serlo, bien porque las acabamos conociendo, bien porque aunque no sea así les ponemos un nombre, un mote, un distintivo? y qué es lo que hace que sean o no significativas en nuestras vidas...? a veces un detalle nimio, que cambia nuestras vidas por completo...sé que me he puesto a divagar, lo siento. Un besito.

Anónimo dijo...

pues mi universo de los recuerdos esta plagado de ti, me pregunto era de mi antes de conocerte? ni yo me acuerdo...me gusta pensar que he vivido casi la mitad de mi vida contigo.
primero estabas tan cerca pero tan lejos...
luego por fin estabas cerca pero tan fugaz...
despues fue cuando te meti en mi mundo de recuerdos...
luego volvimos a tener ganas de desempolvar ese baul...otra vez tan lejos...
al final has sabido encontrar la manera de que el presente siempre este vivo.
gracias

Castigadora dijo...

Universo de recuerdos. Es un buen tema para escribir todos tenemos uno, pero ninguno es igual al otro. Cada persona tiene su propio recuerdo de las vivencias, incluso de las compartidas, me gustó esa ultima frase "es el universo de la vida. es nuestro universo".

Como siempre encantador!

Besos!

Anónimo dijo...

Me gusta como has pasado del tema universitario a los recuerdos. Yo también suelo estar en mi mundo en clase!

Azul dijo...

El universo de los recuerdos... quizá es un universo hermoso, aunque también tenga sus sombras... creo que a todos nos gusta perdernos en él...

Un abrazo

Ana dijo...

Teorías que se van labrando entre apuntes, automaldiciones por no haber empezado a estudiar antes, pasillos llenos de gente "descansando"
Uno siempre quiere cambiar de vida en época de exámenes.
Buena suerte y un beso

Anónimo dijo...

a veces los recuerdos pueden hacer daño si no los tratas con cuidado, hay recuerdos que quieren ser recordados

Arcángel Mirón dijo...

Debe haber una conciencia general que almacena todos los recuerdos del mundo...

Anónimo dijo...

Hola Yo Mismo, a mi también me pasaba lo mismo, la clase era uno de los sitios desde donde más facilmente podía llegar a mi universo de los recuerdos. Había veces que me iba y luego me costaba volver.

Y es que hay profesores que tienen muchos conocimientos, pero que no saben transmitirlos.

Me alegro de poder volver a leerte.

Este comentario tuyo me ha traido recuerdos, me ha hecho volver a mi universo de los recuerdos.
Saludos.

Anónimo dijo...

El universo de los recuerdos... Qué gran sitio.. Ojalá algún día consiga la llave de ciertas puertas que guardan recuerdos olvidados..

Saludetes!

Jorgelina Mandarina dijo...

Yo vivo mirando la ventana y soñando con mundos mejores, viajes submarinos, y claveles en los fusiles...

Gracias por mantenernos despiertos...

Es cada dia una adiccion mayor leerte...

Un abrazote!

Putas y Princesas dijo...

la universidad a mi me enseñó todo cuanto sé y siempre tendré la duda de si hubiera aprendido más sin ella.
deja el universo para los que puedan divisarlo
besos amor

Nosotras mismas dijo...

Nuestro propio universo es el que creamos.

Saludos para llenar tu universo.

CARTABIERTA dijo...

Cada vez me gusta más leerte.
Es el momento del día para adentrarse en ese universo que describes... como si pintaras una puerta.
quién lo iba a decir cuando en primero te veía por ahí sentado!
:)

Anónimo dijo...

¡Qué bonitas cosas escribe tu nena también!

Iba a empezar diciéndote que no me parece bien que en tus clases te escapes a tu universo particular...pero luego he pensado que ese universo al que te evades cuando lo de alrededor no merece la pena, es inmensamente rico, creativo,tierno...y me he sentido aún más orgullosa porque creo que hemos hecho muy bién las cosas.
Hemos llenado tu baúl de vivencias que están sirviendo para construir una persona estupenda, que además escribe cosas preciosas con mimbres muy sencillos.

Un beso enorme para ti y para tu nena, que también es preciosa.

 
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